Saturday, February 9, 2008

Rosa

Bragas

Sé que esta foto parece un poco pornográfica. Quizás lo sea, pero la hice por las bragas que llevaba. Soy una persona un poco rara en lo que respecta a mi ropa interior. Desde pequeña tengo recuerdos nítidos sobre mi ropa interior. Dónde y cuándo la comprábamos. Cuando la lavábamos, la ropa interior se mezclaba. Si no la doblaba yo, tenía que abrir los cajones de mi madre y mi hermana para buscar mi ropa y colocar la suya.

Una amiga mía compró estas bragas en Francia. Yo iba a Italia al día siguiente y no había lavado la ropa y no tenía tiempo para ir de compras. Ella iba a ir a Cora, un gran supermercado que vendía de todo, desde CD a macetas. Mi amiga esta nerviosa a causa de la tarea que le había caído encima, y he de admitir que yo también estaba un poco preocupada por el resultado.

Me compró un pack de tres bragas rosas. Solo me quedan dos: una de ellas no era tan fuerte como sus compañeras. Recuerdo que cuando vi estas bragas pensé: “Dios mío, qué cutres”. Mi amiga leyó la expresión de mi cara y se disculpó diciendo que aunque tenían manchas de leopardo de color rosa eran la opción más elegante de las que había disponibles, y que, cuando se había dado cuenta de eso, había estado a punto de abandonar su misión. Nos reímos hablando de lo que pensarían los italianos si yo tenía un accidente y me tenían que llevar en ambulancia con mis bragas nuevas.

Me gustan los recuerdos y las historias que aportan unas cosas tan básicas. Me gusta pensar en los momentos graciosos que compartí con mi amiga y en el viaje a Italia en el que estrené estas bragas. También me gusta que objetos aparentemente mundanos tengan una historia tan rica como otros objetos más apreciados, como carteras y plumas...

Undies

I know this photo may seem a little pornographic. Perhaps it is, but I took it for the undies I was wearing. I am a slightly strange person in regards to my underwear. Ever since I was a child I had strong memories about my underwear. Where they were bought and when. When we would do washes, the underwear would get all mixed together. If it wasn’t me who did the folding, I would have to go into my mother’s and sister’s drawers to retrieve my underwear and return theirs.

These undies were bought in France by a close friend of mine. I was going to Italy the next day and hadn’t done any washing and didn’t have time to go shopping. She was going to Cora, a big supermarket that sold just about everything, from CD´s to Pot plants. She was nervous with the task given her and I must admit, I was mildly concerned about the result.

She bought me back a three pack of pink underwear. I only have two left, the third pair wasn’t as strong as its companions. I remember seeing this pair and thinking, ‘Oh my god, how tacky’. My friend read my face and apologised saying that although they were pink leopard print they were the most elegant choice available and on seeing that, she nearly abandoned the mission. We laughed about what the Italians would think if I had an accident and needed to be taken away in an ambulance with my new undies.

I like the memories and histories that such basic items provide. I like to think of the funny moments I shared with my friend and of the trip to Italy where I debuted this pair of underwear. I also like that seemingly mundane items have as rich a history as other more esteemed items, such as wallets and pens etc...

7 comments:

Anonymous said...

Acabo de leer todo tu blog... Y creo que es el primer blog que leo. Me ha encantado como te fijas en las cosas, y lo que pasa por tu cabeza cuando te fijas en esos pequeños detalles que mucha gente obvia por ir contrareloj en la vida...

jav_tomcat@hotmail.com

Javi

Luisamiñana said...

La foto no es pornográfica. Es bonita. Y el post encantandor. Haces bien en demostrar lo importantes que son las cosas que apenas lo parecen.

Un saludo.

Bercimuelles said...

Siempre pensando en la ropa interior que llevamos por si tenemos un accidente jajajaja Mi Irene me insistía en ello cuando era mu chico... :)

Anonymous said...

Puede o no puede ser una foto pornográfica: ¡qué importa! Siempre es la mirada lo que importa. Es como mi nick: puede o no puede estar mal. Lo importante es para quien lo ve.
También me gustan los recuerdos: a veces sólo soy recuerdos. Y me cuesta concluir: pero tampoco es tan importante concluir, creo yo.

Harry Sonfór said...

Oiga, Pippi, no. Su foto no es pornográfica. Su foto sería «El origen del mundo» si Courbet hubiera sido mujer, llevara bragas, fuera fotógrafo y se hiciera autorretratos. O no, pero es bonita.

Anonymous said...

¿cada cuando actualizas el blog?

Anonymous said...

Mi abuela siempre decía "no salgas a la calle sin unas buenas bragas, porque nunca sabes lo que te va a pasar".

cuando alguna vez he ido con unas viejas, o que me quedaban mal, pensaba en la posibilidad de un accidente, y terminar en el hospital con todo el mundo criticando el aspecto de mi ropa interior, o por no llevarlas conjuntadas con el sujetador... creía que entonces, accidentada en el suelo, sacaría fuerzas para quitármelas y guardarlas en el bolso, mejor sin bragas que con unas feas.
Siempre he querido ser una chica con braguitas monas, pero como tengo un culo tremendo, siempre termino con bragas blancas de colegiala, lo que no resulta nada atractivo pero bastante cómodo para el día a día.
saludos,

Eva